13.12.07

Alguma notícia




Cheguei de Buenos Aires na sexta passada, já com o pensamento voltado para Maceió, onde estou, desde ontem, para performar (já foi: e "foi tudo", como diria minha amiga e orientanda na Fumec Vanessa de Michelis, a DJ vnss), ministrar um workshop (daqui a pouco) e conversar com os alunos da pós-graduação da Universidade Federal de Alagoas (amanhã), responsável, junto com o Sesc, pela minha vinda para cá. Só para aplacar a saudade, tomem aí umas imagens que produzi para a mostra Poiesis > poema entre pixel e programa, que esteve em cartaz no Rio de Janeiro até o último dia 2/12. Essas imagens integram dois vídeos nos quais trabalhei, com a preciosa colaboração de Leandro Vinicius, com 212 fotos realizadas por mim, direto do laptop. Todo o processo de edição se deu na captura das imagens, isto é, elas não foram submetidas posteriormente a alterações de qualquer ordem: postado diante do "olho/câmera", eu buscava a melhor (ou a pior, conforme o interesse) luz possível, já com um efeito pré-definido, interpondo entre mim e a máquina objetos como cartelas de letraset, frascos de perfume, páginas de livros etc., numa espécie de foto-performance-corpografia mobilizada unicamente pelo prazer do jogo. Volto ao assunto outra hora. Abraços.

28.11.07

Vida conversável

Uma das coisas boas da minha curta temporada estadunidense, em maio passado, foi o encontro com o jovem poeta e ensaísta chileno Fernando Pérez, que me foi apresentado pelo nosso - queridíssimo - amigo comum Guilherme Ribeiro. Transcrevo, abaixo, duas das perguntas/respostas extraídas da longa e memorável conversa que tivemos, os três, na casa de Fernando, em Nova York. A entrevista acaba de ser publicada na revista chilena Letras en Línea (aqui) que traz, ainda, uma seleta de poemeus traduzidos (com grande competência) por Fernando Pérez.

F Ricardo, quería comenzar pidiéndote que nos contaras un poco de tu formación como poeta…dijiste el otro día que venías del ámbito de la música popular, me interesaría entonces saber algo más de cómo se produjo esa transición, si es que fue una transición.

R Bueno, mi primer contacto con el lenguaje artístico en cuanto posibilidad de expresión ocurrió formalmente a los once años, al participar en un grupo vocal en el colegio donde yo estudiaba. Era un grupo que cantaba un repertorio bastante ecléctico que incluía a los Beatles, Caetano Veloso, Jorge Ben, Bee Gees. Era una iniciativa del professor de inglés, que también cantaba muy bien y usaba eso como práctica pedagógica, incluyendo también autores brasileños. Esto es algo que se repite en mi formación: mi primer contacto con la poesía concreta se da en la clase de matemáticas, fue un profesor de esa materia el que me los presentó por primera vez oralmente, me los hizo oír. Pero bueno, a los once años tuve esa primera experiencia con el canto, complementada por alguna formación en teoría musical. Esa experiencia fue complementada también por lo que yo considero mi verdadera iniciación artística, que fue la vida con mis padres y con mi familia: en nuestra casa siempre se cantó muchó, se oyó mucha música, recuerdo hasta la música con que mi madre me hacía dormir, una música llamada “Ricardo, o felizardo”, que era un éxito de los años sesenta. Recuerdo, entonces vivamente a mis padres cantando (mi padre más de vez en cuando, pero muy bien), tanto el repertorio brasileño como Frank Sinatra o Louis Armstrong, que les gustaban mucho. Como a los seis años, nos teníamos que acostar muy temprano, como a las siete. Pero después de comer, todos los días nuestro padre nos sentaba en sus rodillas a mí y a mi hermana y nos cantaba y nos leía en español hasta que nos quedábamos dormidos…

F ¿Y ustedes entendían español?

R Precisamente no, era como una música. También a veces en sus rodillas oíamos programas de radio con cuentos infantiles. La oralidad fue entonces siempre muy importante para mí. Y la visualidad también. Desde pequeño, antes de saber leer, mi madre me cuenta que me gustaba recortar revistas y hacer pequeños collages y montajes, sin ninguna intención artística, sólo por jugar con las imágenes y letras. Pero volviendo a una etapa más avanzada, cerca de los catorce años en el colegio comencé a interesarme en las artes plásticas, sin todavía considerarme para nada artista, eso nunca se me pasó por la cabeza. Fue recién a los diecisiete años que, quien sabe por qué, escribí una primera hornada de poemas y compuse mi primera canción. Como sabes, en Brasil no existe una distinción rígida entre lo popular y lo erudito o culto. Para mí no había contradicción entre esos ámbitos. Esos poemas, que fueron incluidos en mi libro Festín, fueron creados en estilo manuscrito, con un bic de tinta rojo, tenían entonces cierta voluntad de concreción, pero en realidad apuntaban más hacia algo dadá, algo que podríamos llamar “destructivismo”, pero una vez más sin intenciones artísticas elevadas, yo no tenía idea de que existiera la caligrafía como posibilidad de arte. A esa edad, de hecho, el ámbito artístico que más me interesaba era lejos el fútbol. Lo comencé a jugar a los diez u once años, y aprender eso fue mi primera lección de poética. De nuevo comencé por la oralidad, en nuestra casa oíamos mucho fútbol en la radio (mi familia era muy pobre, las entradas para los partidos eran caras). Entonces el fútbol entró en mi vida como práctica de narración (hay que recordar que en Brasil a los locutores de deportes se los llama narradores, lo que es una impropiedad porque en realidad sólo puede narrarse lo que ya ocurrió, no lo que está ocurriendo, pero en fin). Es impresionante el contraste entre el juego real, visto en televisión, que es frío, distante, y su narración, que es ardiente, fabulada cuando no fabulosa, abriendo otros planos de percepción de lo que ocurre en la cancha. Hasta que una vez oí el relato de un juego de Palmeras en que jugaba Ademir da Guia. Cuando había acción, el narrador hablaba rápido, luego, cuando el juego se desaceleraba, el narrador decía “Ademir, hijo del divino maestro”, porque su padre era el creador del estilo de juego que en Brasil llamamos clásico, un fútbol más elegante y apolíneo en contraste con el estilo dionisíaco del dribbling, de un juego más cadencioso. Esto siempre fascinó a los poetas, Décio Pignatari lo llama en una crónica “ademirável” (ademirable) y João Cabral le dedicó un poema. A mí ese cambio de ritmo me parecía fascinante, era una música llena de información verbal. Y un día tuve la suerte de adquirir un ejemplar viejo de la revista Placard, dedicada al fúbtol, donde había una secuencia de fotos de Ademir: para la pelota de pecho, la pelota cae, él la toma y parte corriendo. Entonces yo fui a una cancha y practiqué imitar sus movimientos: esa fue mi primera lección de poética, intentar convertirme por imitación en un jugador clásico. El fútbol se convirtió en mi gran rutina, me pasaba todo el día jugando, aspiraba a convertirme en un jugador profesional. A los dieciocho años, sin embargo, cuando yo estaba indeciso entre la poesía y el fútbol, me llegó un pelotazo en el ojo. Entonces pasé por un período difícil, tuve cinco operaciones. Fue en esa época que decidí no ir a la universidad y dedicarme a un programa de estudios al que soy fiel hasta hoy, incluyendo la práctica didáctica del paideuma concreto (con el que yo aprendí a leer) y de a poco incluyendo autores de otras zonas. Siempre me interesaron menos los dogmas de los manifiestos del concretismo que su práctica poética, especialmente la de Augusto de Campos, sin distinguir entre sus teorías, traducciones o poemas, me parecían fases diversas de una misma cosa. Esa fue mi formación como poeta, un programa disciplinado de estudios autodidacta con el que estaré ocupado aún por un buen rato.

27.11.07

Para aprimorar el portuñol

Encontros de Interrogação. Edición Buenos Aires


Encuentro literario Brasil - Argentina- 4, 5 y 6 de diciembre, de 10.30 a 22 horas- Auditorio de la FUNCEB, Esmeralda 965. Ciudad de Buenos Aires- Entrada libre y gratuita



La primera edición internacional de los “Encontros de Interrogação” en Buenos Aires tendrá lugar los días 4, 5, 6 de diciembre en la FUNCEB (Fundación Centro de Estudos Brasileiros). En esta ocasión se realizará un encuentro entre las literaturas contemporáneas de Brasil y Argentina. En sus dos primeras ediciones, en 2005 y 2007, en San Pablo, “Encontros de Interrogação” contó con la participación de 110 invitados entre escritores, periodistas, críticos literarios e investigadores. En Buenos Aires, la actividad reunirá a escritores y críticos literarios brasileños y argentinos que discutirán sobre las proximidades y distancias que existen entre las producciones literarias de ambos países. El encuentro cerrará con una tertulia de lectura en la que participarán escritores de ambos países. Encontros de Interrogação, Edición Buenos Aires, Argentina es una producción de Itaú Cultural en conjunto con la FUNCEB.

PROGRAMACION

Martes 4

10.30 a 12.30 hs- La prosa brasileña contemporánea. ¿Una lectura posible?

El investigador y escritor Flávio Carneiro conversará con el público sobre las características de la prosa brasileña producida a partir del año 2000, según el recorte abordado en su investigación literaria publicada en el libro No País do Presente – Ficção Brasileira no Início do Século XXI. Moderador: Maximiliano Tomas.


14.30 a 16.30 hs- Fórum de editores de publicaciones independientes

Reunión de editores brasileños y argentinos de revistas y sitios web dedicados a la literatura, que intercambiarán ideas, experiencias editoriales y percepciones sobre la producción literaria de los dos países. Participantes brasileños: Bruno Dorigati, Portal Literal (www.literal.com.br); Edson Cruz, Cronópios (www.cronopios.com.br); Julio Daio Borges (www.digestivocultural.com), Márcio-André, Confraria do Vento (www.confrariadovento.com); e Rogério Pereira, Jornal Rascunho (www.rascunho.com.br). Participantes argentinos: Marina Kogan, (El interpretador), Gustavo Darío López, (Revista Vox), Paula Siganevich,(Revista Grumo) y Guadalupe Wernicke, (Revista Vocal).


17.30 a 19 hs- ¿Profesión: escritor, o profesional y escritor?

Escritores confrontan experiencias sobre la actividad del escritor en Brasil y en Argentina, si es una profesión o una vocación, como se estructura la vida profesional de los escritores. Participan: Flávio Carneiro, Ricardo Aleixo y Florencia Abbate. Moderador: Damián Tabarovsky.


19.30 a 21 hs- ¿Generación es una palabra incómoda?

Poetas y escritores debaten sobre lo que hay en común en las producciones de literatura contemporánea de Brasil y Argentina, principalmente entre los escritores surgidos a partir de los años ´80. Participan: Inés de Mendonça, Guilherme Zarvos, Nelson de Oliveira y Paula Peyseré. Modera: Francisco Garamona.


Miércoles 5


10.30 a 12.30 hs- La poesia brasileña contemporánea.¿Una lectura posible?

El poeta y crítico literario Claudio Daniel expone su observación sobre la producción poética brasileña, de la lírica y formal hasta la poesía de experimentación. Modera: Cecilia Pavón.

15 hs- Lanzamiento de la revista El matadero nº5 .tema de este número:“Aires de familia entre Argentina y Brasil”.Presentación: Marcela Croce (directora de la revista) y Diego Molina.


17.30 a 19 hs- ¿La frontera realmente nos aproxima?

Editores e investigadores discuten las relaciones Brasil-Argentina desde el punto de vista de las relaciones del mercado editorial. Participan: Felipe Lindoso, Samuel Leon y Gabriela Adamo- Modera: Adrian Cangi.


19.30 a 21 hs- ¿Cómo la Historia se transforma en personaje literario?

La cuestión de la contextualización histórica en la lectura del texto literario: la comparación su uso en Brasil y en Argentina. Participan: Ana Maria Gonçalves, Maria José Silveira y Juan Pablo Lafosse. Modera: Maria Fernanda Pampim.


Jueves 6- 10.30 a 12.30 hs ¿Cuál es el personaje de la novela brasileña contemporánea?

La profesora e investigadora brasileña Regina Dalcastangné habla sobre A Personagem do Romance Brasileiro Contemporâneo: 1990-2004, que da cuenta de los personajes de 258 novelas de autores brasileños Modera: Marina Mariasch.15 hs

Lanzamiento: Caos Portátil, Antología bilingüe de poesía brasileña contemporánea.Presentación: Gonzalo Aguilar, Bruno Dorigatti y Cecilia Pavón.

17.30 a 19 hs ¿Qué hace de un escritor un verdadero escritor?

Los conceptos y principios éticos, políticos y estéticos que un escritor debe adoptar según jovénes autores brasileños y argentinos. Participan: Cíntia Moscovich, Luiz Ruffato, Martín Kohan y Juan Terranova.Modera: Florencia Garramuño.

20 a 22 hs- ¿Cuál es el tono de la literatura?

Tertulia de prosa y poesía con la participación de escritores de ambos países. Participan: Andrea Del Fuego, Marcelino Freire, Ricardo Aleixo, Mirta Rosenberg y Marina Mariasch. Modera: Camila do Valle.



INVITADOS BRASILEÑOS



Ricardo Aleixo, Flávio Carneiro, Regina Dalcastagnè, Claudio Daniel, Marcelino Freire, Andréa del Fuego, Ana Maria Gonçalves, Felipe Lindoso, Cíntia Moscovich, Nelson de Oliveira, Luiz Ruffato, Maria José Silveira, Camila do Valle , Guilherme Zarvos.


INVITADOS ARGENTINOS


Florencia Abbate, Gabriela Adamo, Gonzalo Aguilar, Francisco Garamona, Florencia Garramuño, Martín Kohan, Gustavo Darío López, Marina Mariasch, María Fernanda Pampín, Cecilia Pavón, Mirta Rosenberg, Paula Siganevich, Damián Tabarovsky, Maximiliano Tomas, Guadalupe Wernicke.

25.11.07

Lá vem o Brasil descendo a ladeira

Folha de S. Paulo
segunda-feira, 26 de novembro de 2007



Mônica Bergamo



À esquerda, a foto que especialistas dizem não ser do escritor; à direita, Mário de Andrade em imagem extraída de arquivo oficial

É OU NÃO É MÁRIO DE ANDRADE?

"É preciso chamar o IML"

A revelação, pela coluna, de que o governo de SP colocou em banners nas ruas uma foto do escritor Mário de Andrade que não era reconhecida como sendo dele por especialistas acendeu a polêmica nos meios literários. "Essa foto já está virando questão ideológica. O que incomoda é o Mário ser afrodescendente!", diz o poeta Oswaldo de Camargo, do Museu AfroBrasil, que cedeu a foto. Ele diz que extraiu a imagem dos arquivos do jornal "O Estado de S. Paulo", onde trabalhou. O presidente do museu, Emanoel Araújo, defende Oswaldo:

FOLHA - O que acha da polêmica?
EMANOEL ARAÚJO - É uma das coisas mais provincianas que eu já vi na minha vida. A foto estava num arquivo de um jornal há tantos e tantos anos... O retrato parece Mário, quando muito jovem, né? Todo mundo muda quando velho. Vai fazer o quê, né? Se quiserem levar às últimas conseqüências, é preciso chamar o Instituto Médico Legal [gargalha].

FOLHA - Você acha que é ele?
ARAÚJO - Eu acho que sim. Se não for ele, é o Jards Macalé.

FOLHA - Não tem importância?
ARAÚJO - Nenhuma. Eu não sei se não existe uma outra leitura por debaixo disso.

FOLHA - Qual?
ARAÚJO - Essa coisa de branquear as pessoas no Brasil não é novidade, né? Machado de Assis era absolutamente mestiço e no fim da vida ficou branco. A Academia Brasileira de Letras faz questão de pô-lo branco.

FOLHA - O secretário da Cultura, Carlos Augusto Calil, perguntou "quem é" Oswaldo de Camargo diante de outros especialistas.
ARAÚJO - É um tipo de agressividade inócua, inoportuna, deselegante. Quem é ele por quê? Só porque é negro? Poderíamos perguntar quem é ele também. Quem é Carlos Augusto Calil?

22.11.07

Poesia de primeira na segunda



Na próxima segunda-feira, a partir das 19h, na Quixote Livraria e Café (rua Fernandes Tourinho, 274, Savassi), teremos dois lançamentos: o do livro Cada, de Bruno Brum, e o do selo editorial LIRA, que criei sob pressão do sujeito poeta mencionado na linha anterior. É verdade. Depois de algumas tentativas frustradas, eu já havia descartado qualquer hipótese de editar outros livros que não os meus. Até que Bruno apareceu com sua admirável coleção de poemas novos em folha, nos quais identifiquei, de cara, uma unidade poucas vezes vista em trabalhos de poetas de sua faixa geracional. Mais que concordar em emprestar a ele o prestígio nenhum das quatro letras a partir das quais mobilizo minha cada vez mais escassa vontade de diálogo, entendi que o LIRA só fará pleno sentido se funcionar como uma espécie de incubadora de projetos artísticos e culturais. Bruno Brum, com seu novo livro, me permite entender uma frase que me encafifa desde a adolescência: "só se dá força a quem já a possui". Em outros termos, não se pode dar força a quem nem faz idéia da força que tem. Bruno chegou com um livro praticamente pronto - da seleção dos textos ao primoroso projeto gráfico. Se ele assim o quisesse, poderia tranqüilamente prescindir do meu aval ou do de qualquer outro nome um poucochinho mais "destacado" do que a média. Mas não. Quis porque quis, o cabeça dura, correr o risco de ter seu nome e seu trabalho vinculados ao projeto do LIRA - vale dizer, vinculado a mim e a toda sorte de energias contrárias que eu e meu trabalho "do contra" atraímos, nesta Velhorizonte e neste sertão das Gerais abandonados pelos deuses e, no que tange à poesia, pela insensibilidade dos órgãos públicos de cultura. Problema dele, não meu. Ambos sabemos, afinal, que só nos tornamos parceiros porque NÃO tenho qualquer plano de me tornar um "mandarim" - nem ele a disposição para servir -, no sentido que esta palavra ganhou no ambiente cartorial e promíscuo da assim chamada poesia brasileira contemporânea. Quisesse o Bruno abrigar-se sob a proteção de algum mandarinato poético, que procurasse mais para as bandas de São Paulo e Rio de Janeiro. De mim ele só pode esperar o que tenho para dar a poetas como ele: nada. Ou "força" (na acepção que a tradição iorubá confere a este lindo vocábulo: axé). E agora é com vocês. Quem quiser conhecer alguma da melhor poesia que se tem feito no Brasil, hoje, não pode deixar de ler o novo conjunto de poemas (a todos os títulos superior ao bom Mínima idéia, livro de estréia do poeta-designer) reunido em Cada. Em tempo: no lançamento, Benedikt Wiertz e eu participaremos (ele, com seus instrumentos indianos; eu, com meu laptop zoador) da performance-relâmpago com que Bruno Brum dará aos belorizontinos o privilégio de conhecer sua palavra nova e forte.

14.11.07

31.10.07

Um inédito

Pouso



tão lento
quanto

possível agora
pousar o olhar

na parte acesa da rua
de onde

você surgirá agora
pela primeira

vez (ontem tempos
atrás amanhã

antes do sol que se agora)
como se

agora apenas
retornasse

para
(1) esta casa

(2) este corpo e
(3) a alegria

que sempre
agora

lembra
seu nome

28.10.07

não-ficção

O peixe não segura a mão de ninguém


O quarto é um peixe. Três não são peixes. São homens, isto se vê. Nenhum dos três que não são peixes foi pescado pelos demais. Desconfio que o peixe foi pescado por um outro que não aparece na fotografia. Um homem. Com uma câmera fotográfica. O peixe está morto. Não compreende que foi fotografado, morto como parece estar. No tempo em que foi batida a fotografia, todos, menos o peixe, estavam vivos. O menor de todos ainda não fizera filhos em ninguém. Era, ele próprio, filho. Um dos dois feitos por um dos outros dois. Que também eram filhos. De pais que não apareciam na fotografia. E que também eram pais de filhos fora da fotografia. O que segura o peixe era pai do menino de quem o outro dos dois mais velhos segurava a mão. O menor de todos (menor até do que o peixe dado como morto, porque ostentado como um troféu e suspenso por um anzol) tinha uma irmã. Mesmo não aparecendo na fotografia, a irmã do menino era filha do que segurava o peixe. Não se sabe se o peixe, que também era filho, tinha filhos. Nem se o outro homem, o que segurava a mão do filho do homem que segurava o peixe morto, tinha seus próprios filhos, crescidos de sua própria porra. O peixe foi comido por alguém que não aparece na fotografia. E por sua família. Não a do peixe, mas a de quem o fotografou. A família do pai que segurava o peixe não comeu nem a mais minúscula lasca do peixe. A família do outro homem, se é certo que ele tinha uma, tampouco provou do peixe. Dos quatro que aparecem na fotografia, nenhum sorri. Nem diz palavra. O peixe tem a boca aberta. A fotografia comprova o que se diz: que peixes morrem pela boca. As bocas dos três que não são peixes estão cerradas. Por elas não escorrem nem sorrisos nem palavras. São três bocas silenciosas. Três silêncios de ouro. Quatro, com o do peixe. Que está com a boca aberta. Cinco, com o do homem que fez a fotografia. A sombra dele se projeta sobre o corpo do homem que segura a mão do filho do homem que segura o peixe. O peixe, decerto porque está morto, não segura a mão de ninguém. Dos homens, o menor de todos é o único que escreverá um dia sobre o tempo longínqüo em que se posava para fotografias com um peixe morto suspenso por um anzol. O peixe está alheio a tudo o que seu olhar morto já não é capaz de ver. Peixes não escrevem. A maioria dos homens também não. Alguns homens escrevem sobre peixes e homens que pescam peixes para exibi-los como troféus. Uma fotografia é uma forma de pescar pessoas, pensa o menino. Numa fotografia todos parecem mortos, pensará ainda o menino quando já for, não mais um menino, mas o pai de algum menino ou de alguma menina. Um dos quatro na fotografia talvez seja eu. Eu não sou o/um peixe. Ele, o peixe, já havia sido pescado e exibido como um troféu naquele tempo. Eu não sou um troféu. Nem sou os outros dois que aparecem na fotografia. Nem é minha a sombra que repousa para sempre sobre o que parece ser o mais velho dos que aparecem com nitidez na fotografia. E que nunca serão totalmente peixes, mesmo depois de mortos. À mãe dos filhos peixes, minha mãe, aprendi que só devo pedir, agora, quando já não sou o menor de todos, o seguinte benefício: que peixe morto algum se pareça comigo quando a morte vier me pescar.

24.10.07

Novas


A boa é que retorno ao Rio hoje, para participar do programa Salto para o futuro, da TVE, nesta semana dedicado ao tema "Poesia na escola". Aproveito e vou ver com calma a mostra poiesis, no Oi Futuro (ver post abaixo). Volto para BHZ amanhã e já retomo a feitura da quinta edição da revista Roda - Arte e cultura do Atlântico Negro, agora enriquecida pela presença da jornalista Janaina Cunha Melo, que assumiu o cargo de editora-adjunta. Enquanto isso, no LIRA, prossegue o curso "Palavra falante: a voz na poesia" (quem perdeu o bonde, fique ligado, que em março receberei uma nova turma).

Mas a grande novidade mesmo é que a incubadora de projetos editoriais que acabou surgindo no rastro da criação do LIRA já produziu seu primeiro livro: Cada, de Bruno Brum - que considero, sem favor, um dos poetas mais inventivos dentre os que lançaram seus primeiros trabalhos nos últimos anos (em Minas e além-montanhas). O lançamento será no dia 26 de novembro, na livraria Quixote. Até lá, reproduzirei alguns poemas do livro. Quem quiser saber como fazer para garantir o seu exemplar, favor clicar aqui.

17.10.07

Para quem estiver no Rio

Nota: Vou participar da mostra POEISIS com uma paisagem poético-sonora (poetic soundscape) baseada no meu poema para uma eventual conversa sobre poesia com o fiscal de rendas. A novidade é que convidei os 28 alunos das duas turmas de Design do Som I, que ministro na Faculdade de Engenharia e Arquitetura da Fumec, para compor comigo a trilha sonora do trabalho. Um outro aluno, Leandro Vinícius, este da turma de Design do Som II, ficou responsável pela edição dos 3 DVDs que serão projetados simultaneamente na sala que me foi destinada.

13.10.07

Mulher com(o um) livro aberto



Já que eu nunca escrevi sobre essa conjunção mais que essencial na vida de meus neurônios e hormônios tão fatigados, foi preciso recorrer a um dos poemas de Frederico Barbosa que contam entre os meus favoritos para "ilustrar" esta reprodução de uma obra da pintora Francine Van Hove que encontrei por aí e arquivei há meses, para qualquer eventualidade. Nem gosto tanto da pintora, mas

Como quem lê


Virar a chave,
como quem lê uma página:
abrir por dentro,
libertar-se sendo.
Como quem se envolve na personagem,
lento.

Descobrir o além do sonho,
o impensado, o certo,
o mais que imaginado.
O que os olhos buscam cobrir
no sonho.

Ver em você, minha cara,
minha cara interpretada:
metade minha, metade clara.




8.10.07

Babel


Projeto 8 e ½

conversa com Raúl Antelo

Lançamento de
Tempos de Babel - Anacronismo e Destruição
Lumme Editor





Coordenação do projeto 8 e ½

Demétrio Panarotto & Manoel Ricardo de Lima
quinta-feira / 11 de outubro / 19hs

Et Cetera Café
Av. Prefeito Osmar Cunha, 260
Loja 01 - Centro - Florianópolis - SC
Fone (48) 3025-4588
Fax (48) 3025-4889

1.10.07

Cinco décadas à mostra


Chega à galeria Alberto da Veiga Guignard do Palácio das Artes a mostra poesia concreta - o projeto verbivocovisual, um vasto panorama da trajetória criativa dos poetas Augusto de Campos, Décio Pignatari, Haroldo de Campos, José Lino Grunewald e Ronaldo Azeredo. A abertura será no dia 3/10, quarta-feira, para convidados, e no dia seguinte para o público em geral. Sugiro, como aquecimento, uma visita ao site do projeto (http://www.poesiaconcreta.com.br), que traz fotos, vídeos, poemas em áudio, documentos e depoimentos históricos.

30.9.07

Em Curitiba

Quando o peixe salta



Vida corrida como nunca, só ontem à noite pude ver a elogiada montagem do Oficinão 2006 do Galpão, Quando o peixe salta. Eu me sentia em falta com o elenco, com quem trabalhei num workshop, a convite dos diretores Rodrigo Campos e Fernando Mencarelli. Dando mostras da seriedade com que o processo de criação foi conduzido, o trabalho ganhou, no ano passado, o Prêmio Usiminas/Simparc. Como não acompanho regularmente a programação teatral, só posso avaliar a pertinência da premiação pela qualidade do que vi e ouvi ontem à noite. Digo, sem favor, que foi a montagem mais impactante a que assisti nos últimos tempos, aqui em Minas: do uso magistral do espaço cênico (iniciado e desenvolvido em parte - com projeção em vídeo - na rua em que se localiza o Galpão Cine Horto), a jogar com a multiplicidade e a simultaneidade sem prejuízo da compreensão e do envolvimento do espectador, ao texto fragmentado, mas coeso, passando pela preparação corporal e vocal dos atores e pelo design sonoro confeccionado por Lucas Miranda, tudo é digno de atenção e registro em Quando o peixe salta. Quem não viu ainda tem sua última chance hoje, às 20h.

29.9.07

No pelourinho, digo, no centro da Roda Viva

Acompanhei, de início com grande interesse - progressivamente substituído por um misto de tédio e decepção -, a esperada participação de Mano Brown no programa Roda Viva, na segunda feira passada. Pelo que apurei em conversas com amigos e numa corrida por blogues que abordaram o programa, o tom geral, entre os telespectadores, foi de total frustração. O abismo que se verificou entre entrevistado e entrevistadores significa, a meu ver, a mera projeção - ampliada e amplificada -, no âmbito de uma TV pública, do apartheid nosso de cada dia.

Brown foi apresentado como um bicho raro, a ser contemplado não com questões que provocassem sua inteligência privilegiada e sua ironia afiada, mas com cobranças rasteiras, abertamente preconceituosas, junto com perguntas e insinuações de uma estupidez sem par. Deu no que deu: acuado, o compositor rendeu pouco, seu tartamudeio sugerindo, de resto, as marcas deixadas por duas décadas de recusa de conversas com a "mídia" (artifício mercadológico que, compreensivelmente, abriu brechas para a criação de toda sorte de interpretações das "letras-verdade" entoadas pelo Racionais e das atitudes de seus integrantes).

Inútil, por essa razão, tomar o programa pelo que ele não mostrou. O que efetivamente vimos e ouvimos é que conta: nossa dificuldade, hoje, de construir, preservar e potencializar o espaço da palavra pública. Reverter esse quadro é tarefa bastante difícil, impossível de ser realizada a curto prazo - ainda mais num país em que os governos relegam a segundo ou a terceiro plano tópicos que deveriam ser considerados estratégicos, como a cultura, a educação pública e a comunicação.

25.9.07

Cinema poesia (e não "de poesia")



Se o cinema não pode dar conta do mundo, pode, quando menos, à semelhança da melhor poesia, transformar-se numa forma de pensamento, liberto da torpe tarefa de entorpecer ainda mais os estultos com imagens de mera e servil duplicação do real. Mas pensar (não importa com quais extensões do cérebro) é mesmo para poucos, vocês hão de convir. E para poucas, como a norte-americana Carolle Schneeman (1939), que, com o filme Fuses (ubu), de 1965, nos dá uma rara mostração de como o corpo pensa quando a câmera que o capta também pensa. Nesse belíssimo filme quase totalmente silencioso, Caroline faz sexo com seu companheiro à época, o compositor James Tenney, os dois observados por seu gato, Kitch, ao longo dos 18 minutos em que dura a transa. É isso. Mas não apenas.

24.9.07

Programaço



Hoje à noite não me telefonem, por favor, depois que der 22h40. Vou conferir o Mano Brown no programa Roda Viva, da TV Cultura. O mais foda dos rapeiros brasileiros será sabatinado pela psicanalista e escritora Maria Rita Kehl, pelo escritor, professor de literatura e roteirista de cinema Paulo Lins e pelos jornalistas Renato Lombardi (comentarista da TV Cultura), Ricardo Franca Cruz (editor-chefe da revista "Rolling Stone Brasil") e José Nêumane (editorialista do "Jornal da Tarde" e comentarista da Jovem Pan e SBT). Quem perder vai concorrer a uma versão em pdf de qualquer livro do Ali "Não somos racistas" Kamel. Ou do Olavo de Carvalho, tanto faz.

15.9.07

Poesia solo



Em 1995 a Secretaria Municipal de Cultura de Belo Horizonte lançou, em CD-Rom, em parceria com a produtora Ciclope, o primeiro número da revista eletrônica Zapp Cultural. Revê-la tantos anos depois permitiu-me reler, com o mesmo encantamento de 7 anos atrás, uma pequena jóia de sensibilidade poética e consciência intersígnica: o livro Regiztros Efêmeros, de Beatriz de Almeida Magalhães – o “z”, em “registros”, prefigurando o assunto da curiosa obra, que ressemantiza, em formato híbrido de poema-ensaio, os sinais grafopoéticos, feitos com giz branco, das perambulações de um sujeito negro e anônimo pela Belo Horizonte das décadas de 1970/80 – com uma nova “aparição” em 2000.

A operação de leitura do texto de Beatriz Magalhães se impôs, para mim, como um exercício de tradução intersemiótica. A precariedade do meio eletrônico, à época da feitura da revista, obrigou-me a criar outras formas de ler o livro para além da passividade exigida pelo CD (que, de “interativo”, não oferece mais que a possibilidade de clicar no ícone situado no canto inferior esquerdo da tela para ter acesso a novas fotos). Isso empobrece demais a fruição desse poema-ensaio, cuja estrutura iconiza a “callgrafia erótica” – porque em jorros, desbordante –, a “calgrafia cáustica” de nosso fazedor sem nome e sem documento. Seria preciso ler esses Regiztros Efêmeros de outra maneira, com as palavras respirando desgovernadas, como certamente terão surgido a Beatriz no momento primeiro de sua contemplação da signagem porno e ludográfica do poeta de rua.

Como não me foi possível imprimir o e-book de Beatriz, tive que copiá-lo inteiro à mão, dessa forma integrando-me a uma tão ampla quanto intrincada rede de relações produtivas de leitura: minha “manuscritura” é, assim, a tradução de uma das muitas possíveis traduções dos signos que, sabe-se lá por quê, o vate errante de Belo Horizonte traduzia com obstinado rigor. Escrevi para reler, ler direito. Ao fim da jornada, senti-me como um copista medieval dotado, extraordinariamente, de habilidade manual e capacidade de decifrar o que copia. Valeu a tinta gasta, o redesenho de palavra por palavra – em outro arranjo, aberto a novas leituras, “mais minhas”, quem sabe. Infelizmente, para rever as fotos de da própria Beatriz, de Gerson Alvim Pessoa e de Rodrigo Andrade que documentam o texto, só mesmo recorrendo ao CD-Rom.

Vamos ao poema. No inferno da urbe-mais-que-pólis, Beatriz guia o leitor desejoso de se embrenhar na selva selvagem de uma imaginação delirante que, à sua maneira, reordena as coisas, os seres, nomes e números do mundo (impossível não lembrar Bispo do Rosario e, mais apropriadamente, talvez, o Profeta Gentileza). A leitora-poeta escancara para o leitor sensível uma poética estranha e bela que “cobre a cidade/ com seu falo/ logomarca”, em “seminal semiologia” (em linguajar popular, o tal “falo logomarca” é um muito bem traçado “caralhinho”, com sua ponta redonda mirando, ciclópico, o infinito). Essa maneira de se apossar de uma cidade, de possui-la, me faz pensar na quadra final de um poema de Mário de Sá-Carneiro, Abrigo, que expressa, em termos desbragadamente eróticos, o amor do modernista português por Paris: “Mancenilha e bem-me-quer,/ Paris – meu lobo e amigo.../ Quisera dormir contigo,/ Ser todo a tua mulher!...”

A diferença é significativa: Sá-Carneiro abre-se, receptivo, feminino, ao encanto da velha cidade, que ele masculiniza, enquanto o poeta andarilho e fescenino exibe, como emblema de uma eroticidade voltada tanto para a fruição gozoza do corpo da cidade quanto para a “função reprodutora” – de sentidos – que ele ora reitera, ora altera –, além de frases de brasileiríssima, macunaímica safadeza (“AVIZINHA/ AIRMA/ ATIAFILHAAPRIMAA MAEA SUBRIA/ DE PELE METEU/ CUM BRANCO BRANCO/ CUM MORENO MORENO/ DA VARA/ DESITAMAIO”), um pênis “no mais das vezes ereto”. O “jorro branco de versos” como os citados acima, que “escorre pelo muro/ faz ângulo na calçada/ desce o meio fio” e “esparrama no asfalto/ anáforas/ aliterações”, é que submete e “emprenha furtivo” a cidade: torna-a “resignada”, “re/signada”, como conclui Beatriz Magalhães.

E a poeta-leitora não pára aí. Querendo descobrir a origem (“daqui ou de fora”) do poeta sem eira nem beira, Beatriz propõe adivinhas ao seu provável leitor: “Poeta esse de onde?/ Um poeta de SP?/ Um poeta de BA?/ Um poeta de MG?/ Um poeta de BH?// Um poeta de Confins?/ Um poeta das redondezas?/ O poeta das voltas redondas?/ O poeta dos passos fundos?/ O poeta das contagens?/ Nascido e criado/ em qual cidade?/ Em qual estado?/ Em que estado?/ Em que tempo? Em que idade, meu Deus?”. Respostas possíveis: sim, um “poeta das redondezas”, ou da circularidade de suas grafoepifanias; sim, um “poeta das contagens”, ou da catalogação minuciosa das coisas do mundo; sim, um poeta em “estado” de graça e de total disponibilidade em relação à hipótese – restrita às crianças, aos poetas e aos loucos – de reinventar o mundo mesmo que, por não dispor dos instrumentos de que habitualmente se vale um poeta, veja-se obrigado a poetar nas ruas e muros da cidade; sim, um poeta “dos passos fundos”, a perseguir obsessivamente o “caminho da perda”, como Vielímir Khlebnikov, vagamundo russo que se autodenominava “presidente do Globo Terrestre”, e Antonin Artaud, nascido na França, renascido em Bali e no México e desnascido por onde quer que tenha passado. Sim, um poeta “sem tempo” a perder com a péssima idéia que o mundo faz de seres humanos como ele, capazes de perder até o que não têm, só para poderem continuar a criar suas “nonadas”, seus “inutensílios”. Sim, “um poeta de/ extrema necessidade de/ andaraí/ viramundo/ ivirapoeira”, (in)completa Beatriz.

O mundo, o mundo. Mas que diabo será “o mundo”? E que serventia tem a arte, sobretudo quando se trata de uma arte que sequer aspira a tal condição? Respondo não com uma rima, mas com uma citação extraída de um ensaio da filósofa alemã Hannah Arendt intitulado “A permanência do mundo e a obra de arte”: “Entre as coisas que emprestam ao artifício humano a estabilidade sem a qual ele jamais poderia ser um lugar seguro para os homens, há uma quantidade de objetos estritamente sem utilidade e que, ademais, por serem únicos, não são intercambiáveis, e portanto não são passíveis de igualação através de um denominador comum como o dinheiro; se expostos no mercado de arte, só podem ser apreçados arbitrariamente. Além disso, o devido relacionamento do homem com uma obra de arte não é “usá-la”; pelo contrário, ela deve ser cuidadosamente isolada de todo o contexto dos objetos de uso comuns para que possa galgar o seu lugar devido no mundo.” (A Condição Humana, pp 180-1, Ed. Forense Universitária).

Para Arendt, “as obras de arte são as mais intensamente mundanas de todas as coisas tangíveis; sua durabilidade permanece quase isenta ao efeito corrosivo dos processos naturais, uma vez que não estão sujeitas ao uso por criaturas vivas – uso que, na verdade, longe de materializar sua finalidade inerente (como a finalidade de uma cadeira é realizada quando alguém se senta nela), só pode destruí-la. O que nos autoriza, então, a pensar a “graforréia” de um “talvez-poeta” (copirráite Tião Nunes) visual que nem nome tem, como arte?

Força é lembrar, neste ponto, que o ensaio de Hannah Arendt é datado de 1958, quando eram escassos, mesmo nos contextos mais adiantados, estudos de fôlego sobre a performance art que a tratassem como gênero artístico autônomo e “respeitável”. Para nos restringirmos à Europa, apenas em 1964 Joseph Beuys participa pela primeira vez de uma edição da Documenta de Kassel. É, todavia, da perspectiva da performance que se pode considerar a “obra” do poeta-andarilho. Uma arte pobre (“Pop povera concreta/ solidão”, diz Beatriz), antiartística, efêmera, e por isso mais “inútil” que qualquer outro “inutensílio”. Tão “inútil”, diga-se, que o sujeito-negro-com-mão-branca-de-giz autor dessas proezas sígnicas sequer as assinava, nem que fosse só para ter o gostinho de ver seu nome “desaparecendo/ com a ação do tempo/ ou com os acessos dos moralistas” junto com suas garatujas.

“Discreto exibicionista/ de esquinas/ e contra-esquinas”, nosso fugidio “Senhor Ninguém” só queria nos mostrar “a qualquer momento/ seu verbo duro”, Beatriz disse. Para quem queria tão pouco, acabou nos dando bem mais: com ele, com o que restou de sua ação poética, aprendemos a prática de uma “estratégia de destruição, na cidade, do seu sistema de ordem” (Lucrécia D´Aléssio Ferrara, Ver a cidade, Ed. Nobel, 1988). Sua performance é, em suma, uma outra forma de perceber a cidade e, mais que isso, de tentar alterar seus significados e usos. O nome disso talvez seja poesia. Ou, para dizer como Beatriz de Almeida Magalhães, “poesia solo”. [Este ensaio integra o meu livro Palavras a olhos vendo, finalmente no prelo].

14.9.07

Casa nova

Tornar público o novo endereço da minha posse justo no dia em que completo 47 anos não passa de uma coincidência que agora, já (quase) sem sentir o calor do inferno astral, posso definir como feliz. Animado com o maior número de recursos oferecidos pelo blogspot, começarei em breve a disponibilizar trabalhos - meus e de outros artistas - em áudio e em vídeo, sempre com o foco na experimentação técnico-formal. Em linhas gerais, essa será a única grande alteração no programa do jaguadarte, que continuará a oferecer textos críticos e ensaísticos, entrevistas, reprodução de matérias de interesse coletivo, notícia dos eventos de que tomo parte, poemas inéditos e alguma provocação. Os arquivos do www.jaguadarte.zip.net permanecerão disponíveis para os eventuais interessados. Sintam-se em casa!